4 octubre, 2013

DESEMPLEO, SALUD y VIOLENCIA

Por Josefina Leroux

desempleoSeg煤n Jahoda (1979), un salario no es la 煤nica funci贸n del empleo.

Este tiene un significado psicol贸gico como la motivaci贸n, el estatus, la identidad, el desarrollo personal y social. Por eso, en una cultura el desempleo es una se帽al de la incongruencia en las sociedades postmodernas.
El trabajo es un derecho que representa la oportunidad para crecer y desarrollarse que toda persona adulta debiera tener.
El problema se origin贸 en el pasado siglo veinte, cuando las masas superaron la creaci贸n de empleos. Desde entonces, los estudios del fen贸meno del desempleo dan cuenta como ingresa a sus filas cada a帽o mayor n煤mero de afectados consecuencia de crisis econ贸micas y pol铆ticas que escapan al control de las mayor铆as.
El asunto adquiere mayor importancia ya que los efectos del desempleo no s贸lo tocan a los despedidos o reci茅n egresados que se han cansado de tocar puertas. Los seres queridos y familiares tambi茅n resienten los males de la desocupaci贸n.

Deterioro en la identidad

La primera funci贸n del trabajo es la de proveer de medios econ贸micos para subsistir. Estar desempleado disminuye los ingresos y la calidad de vida pero tambi茅n lesiona la identidad y autoestima.
Tener un puesto digno permite a las personas crear una imagen personal y social. Un trabajador se sabe con ciertas habilidades que mejora con la experiencia, lo que proporciona seguridad y confianza en s铆 mismo. Adem谩s, la pertenencia a una empresa y a un grupo de compa帽eros, le asegura un estatus y reconocimientos importantes para su amor propio.
Si el desempleo se alarga, comienzan a surgir dudas de las propias capacidades y las inhibe gradualmente. El aislamiento obligado dificulta las relaciones con los dem谩s progresivamente y contribuye un sentimiento de verg眉enza de estar fallando.
Estudios de Goldberg, Miles, y otros investigadores, han encontrado que los j贸venes que acaban sus estudios y no encuentran un empleo tienen un alto riesgo de sufrir trastornos ps铆quicos menores. La salud previa no influye en esta secuela.
La depresi贸n es uno de los trastornos que m谩s se repiten entre desempleados, especialmente entre los varones, llev谩ndoles en algunos casos a intentos de suicidio. Parad贸jicamente, quienes han tenido mejor oportunidades tienen menos tolerancia a la frustraci贸n comparados con aquellos que eventualmente ha sido rechazados, que cuentan con una vacuna.

El Estr茅s

El estr茅s es otro problema frecuente que ocurre cuando falta el empleo lo que vulnera al cabo de un tiempo el sistema inmunol贸gico de las personas afectadas. Se enferma m谩s quien tiene un sistema de defensas debilitado. Todas las enfermedades son de origen psicosom谩tico por esta raz贸n.
Adem谩s de los problemas emocionales y los trastornos f铆sicos que provoca la falta de trabajo, se ha encontrado un deterioro en los procesos de pensamiento de los desempleados.
Investigaciones de Fryer y Warr en 1984, encontraron en 954 extrabajadores una reducci贸n en doce procesos cognoscitivos diferentes. Entre un 30 y 37% de las personas participantes en el estudio admiti贸 que necesitaba m谩s tiempo para hacer las mismas cosas, concentrarse y hacerlas con la destreza que antes. Entre un 20 y 27% dijo tener dificultades en comenzar alguna tarea, mantenerse mentalmente activo, recordar cosas, tomar decisiones y comprender lo que hablan otras personas. El 15% reconoci贸 m谩s errores en la conversaci贸n con otros. Un 11% acept贸 equivocarse con las operaciones num茅ricas, y un 8% coment贸 que le costaba m谩s entender los peri贸dicos y libros.

Problema de salud

Tener un empleo satisfactorio permite ejercitar la mente consistentemente. Dif铆cil meta de cumplir estando en casa inhabilitado. En cualquier entorno, el bienestar psicol贸gico depende del n煤mero de oportunidades que ofrezca para desarrollarse y relacionarse gratificadamente.
Un medio que niegue alguna de estas, afectar谩 la salud mental antes o despu茅s de darse cuenta las personas.
Tras las constantes recesiones, el tema del desempleo se convierte en un problema de salud p煤blica que requiere la atenci贸n interdisciplinaria que reporte al secretario de trabajo en turno. Las secuelas de su incompetencia para crear nuevos empleos debieran traducirse de dem茅ritos profesionales.
Estamos hablando de un asunto de emergencia nacional que ya empieza hacer estragos en la salud de las personas. Lo que sigue, son otros males implicados en los caminos m谩s cortos para lograr subsistir. El ocio es padre de vicios.
Y otros hallazgos. Hay que saber que los j贸venes desempleados dan m谩s apoyo verbal a cambios sociales radicales y justifican en mayor medida las acciones violentas. Que conste la advertencia.